Considera que un vestido de novia es costoso, o compras el vestido o compras el nuevo IPhone. Muchas veces el novio, en su ilusión de cumplirte tus deseos, cree que bastarán 5000 pesos, y cuando se entera de que el precio es mucho mayor, se quiere echar para atrás. Platica con tu novio sobre quién va a pagar el vestido, infórmale sobre el gasto que implica y fijen un presupuesto realista. Aunque seas tu la que lo usarás, será el también quien quiera ver a su futura esposa con lo mejor de lo mejor, y obvio lo que ella desea.
Revisa bien en qué momento podrás disponer del dinero destinado a tu vestido y comienza tu búsqueda cuando esa fecha esté cerca, de otro modo puedes encontrar una buena oferta, pero no tendrás el dinero necesario para comprarlo o para apartarlo y dejarás ir una gran oportunidad.
Si encuentras un vestido que te enamore, deja de buscar y cómpralo en ese momento. Si sigues buscando, compararás todos los demás con el que ya ganó tu corazón y será una travesía sin sentido, además de que te arriesgas a que otra novia lo compre antes que tú y pasarás toda tu vida lamentándolo. Por lo regular, un vestido de novia tarda hasta 6 meses en entregarse, asegúrate de buscar el tuyo con suficiente tiempo de anticipación y no te arriesgues a que no esté listo para tu boda.
Como novia debes entender que, a diferencia de todo lo demás, el vestido es una compra totalmente a ciegas. El novio va a pagar algo que no va a ver hasta el día de la boda, así que es importante que te sienta segura de lo que estás comprando. Lo más importante, es que compres el vestido con el que te sientas cómoda, que te gustó y que deseas caminar por el altar con él. El vestido sólo lo usarás tú, y aunque puede ser que tu novio lo vaya a pagar por ti, eres la única que puede decidir cuál comprar y en el cual vas a entrar a una nueva etapa de tu vida.
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