Si estás en época de planeación de tu boda, te recomendamos ampliamente que te alejes de los programas de televisión con temática de bodas. Sabemos que son la principal atracción de algunos canales de paga y probablemente has visto más de uno, o incluso más de alguno se ha convertido en un gusto culposo y nunca te pierdes ningún capítulo, pero si estás buscando fuentes de inspiración para la planeación, el vestido, el banquete y otras cuestiones de tu celebración, es mejor que te alejes de ellos.
Aunque sean entretenidos y creas que te pueden servir de ejemplo, lo mejor es no ver ni sus comerciales. Recuerda que, por muy creíbles que se vean las situaciones que muestran, al final del día son programas de televisión. No dudes en que gran parte de las novias son actrices contratadas o chicas que, a cambio de dinero extra para terminar de pagarle a sus proveedores, exageran y dramatizan sus acciones y reacciones.
Si la tentación es demasiada y no puedes vivir sin ver las peleas entre la novia y su mamá por el vestido, o a todo el mundo perder la cabeza por detalles sin importancia, velos como mero entretenimiento y no como una guía o referencia. Todos los programas y todos los casos, sin excepciones, están fuera de la realidad y en la gran mayoría, las cosas no suceden como te las muestran, ¿o alguna vez has visto a una novia gritarle a su mamá en plena prueba de vestido?
Recuerda que al final del día, en la televisión los novios siempre tendrán una solución, y esto puede que en la vida real no suceda, aunque estamos seguros que tu y la pareja en la televisión tienen algo en común: terminarán la noche con un "felices por siempre".
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